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Si encuentra una garrapata dentro de su casa, esto es lo que necesita saber

Me gusta pensar que siento amor y comprensión por todas las criaturas. Ni siquiera las arañas y las serpientes (fobias bastante comunes entre los humanos) me asustan hasta el punto de tomar medidas para evitarlas.

Se podría decir que tengo un umbral de tolerancia alto en lo que respecta a los bichos espeluznantes… pero no a las garrapatas.

No, por vergonzoso que me resulte admitirlo, no perdería ni un ápice de sueño si las garrapatas desaparecieran del mundo mañana y nunca más volvieran a verse. El problema es que no solo son molestas (por no hablar de que son invasivas y, bueno, lo suficiente como para ponerle los pelos de punta a la mayoría de las personas), sino que también pueden ser peligrosas.

Las garrapatas pueden transmitir enfermedades debilitantes, como la enfermedad de Lyme y la fiebre maculosa de las Montañas Rocosas, por lo que no hace falta decir que probablemente no sean los mejores huéspedes de su casa para recibirlos…

Dicho esto, dependiendo de dónde vivas, la época del año y si tienes o no mascotas en casa, las probabilidades de que te encuentres con garrapatas pueden ser bastante altas.

Entonces, ¿qué hacer si te encuentras con una de estas pequeñas plagas?

Identificar y aislar el problema
Es una buena idea que intentes identificar el tipo de garrapata (si es de patas negras, de perro o marrón). Si la garrapata se encuentra en un área específica, mantén a tus hijos o mascotas alejados hasta que se haya eliminado la garrapata.

Medidas de protección
Para asegurarse de que la garrapata no se le pegue, use guantes y ropa de manga larga para que su piel no quede expuesta.

Limpiar a fondo
Asegúrate de lavar a fondo toda la ropa o la ropa de cama con la que haya estado en contacto la garrapata. Hazlo a temperatura alta. Aspira la zona, prestando especial atención a las grietas y las esquinas.

Cómo quitar garrapatas
Tome unas pinzas de punta fina y agarre la garrapata lo más cerca posible de la superficie de la piel. Tire lentamente hacia arriba, pero evite torcer o sacudir para asegurarse de que la cabeza de la garrapata no se rompa y permanezca en su piel.

Después de quitar la garrapata, limpie las zonas de la picadura con alcohol o agua jabonosa. Puede utilizar alcohol para desecharla o tirarla por el inodoro.

Vigila tu mordedura
Es una buena idea vigilar cualquier sitio de mordedura que encuentres, así como también vigilar a la persona que ha sido mordida para detectar síntomas.

¡Espero que esto te ayude! Comparte este artículo en Facebook para ayudar a difundir el mensaje.

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