Fallecimiento de un candidato de Casado a primera vista a los 33 años.

Si el programa funciona es sobre todo gracias a candidatos que tienen una personalidad atípica y las localizaciones que ofrecen las distintas cadenas suelen ser divinas.

Tras la noche de bodas y la luna de miel, surge una elección: continuar como marido y mujer, o divorciarse, lo que desemboca en algunas escenas bastante divertidas.

Para el estreno del programa neozelandés, llamó la atención de la producción y del público un joven de 26 años, un tal Andrew Jury.

Presentado como un hombre extrovertido, encantador y espontáneo, había venido buscando el amor, como los demás candidatos de Married at First Sight NZ.