Para beneficiarte de ella, simplemente mezcla una cucharada de miel en un balde con agua tibia y sumerge tus pies en ella.
3 – HARINA DE ARROZ
La harina de arroz también tiene un buen efecto sobre los talones secos y agrietados. Combínalo con miel, manzana rallada y aceite de oliva y deja la mezcla resultante en tus pies durante unos minutos o hasta que la piel absorba toda la humedad. Enjuagar bien e hidratar con una crema casera o aceite vegetal.
4 – BAÑO DE PIES CON ZUMO DE LIMÓN
Crédito: ohmymag
Remoja tus pies en el jugo de 3 limones mezclado con un poco de agua tibia durante unos 15 minutos, luego exfolia los talones con una piedra pómez. Este baño se debe realizar una vez por semana hasta que los callos y la capa gruesa debajo de los talones se derritan. El ácido natural y la vitamina C del limón ayudan a disolver y eliminar la piel muerta y seca.
5 – PLÁTANO
Rico en vitaminas A, B6 y C, el plátano ayuda a mantener la elasticidad de la dermis y es una de las recetas hidratantes de la abuela más eficaces. Para preparar tu tratamiento hazte con un plátano maduro que te garantizará resultados óptimos porque no contienen ácidos agresivos para la piel. Tritura la fruta y luego frota tus talones con la preparación. Déjelo actuar unos veinte minutos antes de enjuagar con agua limpia. Repita el proceso todas las noches antes de acostarse durante 2 semanas hasta lograr un resultado satisfactorio.
6 – BICARBONATO DE SODA
Crédito: lelum
Repite este tratamiento dos veces por semana.
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